Bosques vivió el levantamiento contra el dictador Porfirio Díaz en su natal Estado de Puebla, lo que lo hizo tomar conciencia de los problemas sociales. El general Lázaro Cárdenas lo nombró en 1938 cónsul general en París.
En 1942 Bosques fue trasladado a Marsella como cónsul de México. En el consulado mexicano,, donde vivía con su familia albergó a cientos de refugiados republicanos de la Guerra Civil española y judíos perseguidos durante la Segunda Guerra Mundial. Estas acciones hicieron que las tropas alemanas asaltaran el consulado en 1942 y Bosques y los suyos fueron arrestados y confinados en los Pirineos, trasladados luego al centro de Francia y desde allí a la localidad alemana de Bad Godesberg, donde permanecieron un año y dos meses hasta ser canjeados por alemanes prisioneros en Lisboa. De Lisboa partieron hacia Nueva York y desde allí regresó a México con su familia. Es increíble que en México nadie lo conozca y una calle de Viena lleve su nombre.
No sabía nada de este señor, indagaré para saber más sobre él. BUEN BLOG!
ResponderEliminarLa placa dice: Ha ayudado a muchas personas a escapar del régimen nazi. Nada fácil ir a contracorriente, menos ante regímenes como el nazi, o el comunista de Stalin.
ResponderEliminarVale el reconocimiento a un latinoamericano. Gracias.
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