Mi último acción de gracias

Nunca se me ocurrió preguntarme porque Marck tenía un cuchillo en la mano.  Lo vi como algo normal -¿estaría cortando el pavo?- hasta que lo hundió entre mis costillas. Mi primera reacción fue sorpresa. Una sorpresa mayúscula con la que estoy segura que Marck se regocijó durante mucho tiempo. Sin ninguna duda, con lo que mas disfruta al recordar el momento en que me asesinó es con mi cara de asombro.
Después vino el dolor, un dolor agudo que se iba extendiendo por todo mi tronco. Entonces caí al suelo, y antes de cerrar los ojos y dejar de respirar, observé el rostro de mi esposo, descompuesto en una mueca grotesca, con la vista clavada en mi pecho desgarrado. Eso fue lo último que vi del mundo. Morir es realmente desagradable - no os lo recomiendo - y todavía es peor si no sabes el porqué de tu muerte. Me explico: un condenado a muerte conoce los motivos por los que es ejecutado antes de ser electrocutado, o gaseado, un enfermo conoce la enfermedad que le está arrebatando la vida, pero yo no supe nada. De pronto, sin ningún motivo, mi marido me acuchilló y se quedó observando como me desangraba.
¿Porque creeis que lo hizo?